Después
Hoy me gustaría hablar
del sentimiento con el que anoche me fui a dormir tras una tarde más bien
desagradable en Twitter. Después de una convulsa y decepcionante temporada, el
verano se veía como la oportunidad de redimirnos de nuestras heridas y mirar el
futuro con entereza y optimismo, pero creo que no lo hemos logrado.
El madridismo se ha
instalado en la eterna infelicidad, incapaces de disfrutar lo que tenemos, de
amar del privilegio que se nos proporciona y nos instalamos en un eterno debate.
Durante la temporada no fuimos capaces de ver más allá de la posible marcha de
Mourinho hasta llegar a la obsesión, cualquier detalle o mirada era analizada
al milímetro. Después de cada victoria venía una polémica bien por un capitán
que le sobra un brazalete, bien porque el entrenador se enzarzaba con Toril,
bien porque Cristiano estaba triste, bien porque Higuaín estaba siempre en
fuera de juego o bien porque Marcelo estaba gordo y había que colgarle de una
butifarra gigante. Siempre en la pelea, en la desilusión.
Sólo un día esta
temporada pasada fuimos un cañón, una ciclo génesis perfecta, esa tarde de
abril 5 horas antes de la vuelta contra el Borussia, el Bernabéu, los
alrededores, las redes sociales y el madridismo universal fuimos FELICES.
Ha llegado el verano y
el trascurrir del mismo ha sido un plomo insoportable en los zapatos en el que
todos hemos contribuido, el primero yo. Nos hemos peleado, zarandeado y
dividido, unos con Casillas otros contra Mou, unos contra Marcelo otros contra
Arbeloa, o contra Benzema. Muchos llegaron a pensar que Ancelotti era el tío
que limpiaba los zapatos a Florentino, a saber de que sus 4 ligas de campeones
se las han regalado en la tómbola de mi pueblo…En fín una tras otra una pelea,
una guerra.
Y por fín llega Bale! Y
qué hacemos los madridistas? Pues estar infelices porque a la vez que se
anuncia al galés, el Club filtra la venta de Özil y la deseada venta de Kaká.
Otra vuelta al debate, esta vez con la torpeza del Club que resta protagonismo
a su fichaje estrella el día de su anuncio.
Sólo espero y deseo
que esta nueva temporada nos dediquemos a disfrutar de lo que tenemos, somos
unos privilegiados, orgullosos como nadie de ser aficionados y socios del Club
más importante del mundo.
Y ojo! Que la crítica
no debe parar, somos auto exigentes de nacimiento pero si nos empeñamos en tapar cada alegría con un mal rollo, esto no hay quien lo aguante. El enemigo está fuera y es poderoso deportiva y mediaticamente
Hoy presentamos a
Gareth Bale el cañón galés que nos va levantar de los asientos y sofás, Sentémonos
a disfrutar!
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